Desde la cima de la antigua torre, solitario gorrión, hacia los campos vas cantando hasta que muere el día y la armonía corre por el valle.
La primavera alrededor brilla en el aire y en el campo exulta, como al mirarla el alma se enternece. Escuchas los balidos, los mugidos. Las otras aves juntas, compitiendo, dan, alegres, mil vueltas por el cielo libre, y celebran su estación mejor.
Tú, ajeno y pensativo, miras todo; sin volar, sin amigos, huyendo del juego y evitando el gozo; cantas, y así atraviesas la flor más bella de tu edad y el tiempo.
Además en una plática entre el ruiseñor y el gorrión ( Fábula de el Ruiseñor y el Gorrión ) , ambos nos dejan una lección muy importante : " ... Nadie debería creer saber tanto como para pensar que ya no tiene nada más que aprender ".
Y qué tristes serían sin ellos nuestras ciudades...!
ReplyDeleteDesde la cima de la antigua torre,
ReplyDeletesolitario gorrión, hacia los campos
vas cantando hasta que muere el día
y la armonía corre por el valle.
La primavera alrededor
brilla en el aire y en el campo exulta,
como al mirarla el alma se enternece.
Escuchas los balidos, los mugidos.
Las otras aves juntas, compitiendo,
dan, alegres, mil vueltas por el cielo
libre, y celebran su estación mejor.
Tú, ajeno y pensativo, miras todo;
sin volar, sin amigos,
huyendo del juego y evitando el gozo;
cantas, y así atraviesas
la flor más bella de tu edad y el tiempo.
(LEOPARDI)
Además en una plática entre el ruiseñor y el gorrión ( Fábula de el Ruiseñor y el Gorrión ) , ambos nos dejan una lección muy importante :
ReplyDelete" ... Nadie debería creer saber tanto como para pensar que ya no tiene nada más que aprender ".
Pronto se oirá aquello de " como menos que un gorrión ". Como decía Hernández: que no nos coja el hambre .
ReplyDeleteM.H