El apocalipsis está en plena vigencia y parece que nadie se ha enterado. Las señales están por todas partes, pero, estamos tan confundidos que nuestros sentidos han perdido su capacidad para percibirlas.
Por primera vez la humanidad dispone de tecnología para evitar las carencias básicas a toda la población mundial, y a pesar de eso el auto-apocalipsis atómico está cada vez más cerca. También por el talante de los mandatarios globales: Trump, Putin...
El próximo (y último) Hiroshima puede ser planetario.
Me niego a aceptar que no pueda evitarse, como una maldición del homo sapiens a partir de un deyerminado grado de desarrollo.
Me resisto a admitir que somos genéticamente apocalípticos.
El apocalipsis está en plena vigencia y parece que nadie se ha enterado. Las señales están por todas partes, pero, estamos tan confundidos que nuestros sentidos han perdido su capacidad para percibirlas.
ReplyDeletePor primera vez la humanidad dispone de tecnología para evitar las carencias básicas a toda la población mundial, y a pesar de eso el auto-apocalipsis atómico está cada vez más cerca. También por el talante de los mandatarios globales: Trump, Putin...
ReplyDeleteEl próximo (y último) Hiroshima puede ser planetario.
Me niego a aceptar que no pueda evitarse, como una maldición del homo sapiens a partir de un deyerminado grado de desarrollo.
Me resisto a admitir que somos genéticamente apocalípticos.
"determinado grado de desarrollo"
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